Somos espuma,
somos tristeza
somos la última sonrisa de paz.
Porque tu eras dual,
fuerte y suave por igual
sabía y frágil, tu eras bondad.
Porque somos lo que eras,
y nos dejas lo que fuiste,
y si conocerte más pudiera
al cielo iría, para a ti poder unirme.
Pero se quedan en mí
tus besos y abrazos
tus juicios y halagos
los besos tronados
que nos han marcado
y recordaremos siempre de ti.
Y se quedan aquí
los recuerdos, las risas
tu paciencia y tus prisas
y las bellas caricias
que en secreto he guardado
para tener tu esencia siempre en mí.
Porque fuiste una niña,
una guerrera y reina
una madre y profesora
una abuela que atesora
a sus hijos y a sus nietos,
a exalumnos y bisnietos
un corazón grande y sincero
un ser que ahora sin duda brilla en el cielo.
Mi Virginia bonita,
mi lucero que brilla
entre nosotros existes
porque de ti un poco nos diste.
Mi Virginia preciosa
no me queda otra cosa
que guardarme este abrazo
pues es solo un hasta luego
aun me queda recorrer otro tanto
y es por ti que sé mi dirección.
![](https://static.wixstatic.com/media/d9571b_86fc2118f48147c0bdc39213e18eed37~mv2.jpg/v1/fill/w_980,h_551,al_c,q_85,usm_0.66_1.00_0.01,enc_auto/d9571b_86fc2118f48147c0bdc39213e18eed37~mv2.jpg)
Comments